Peces transparentes de Iori Tomita
Un sorprendente mundo de fantasmas abismales surge de las más oscuras profundidades del mar, bienvenido al ”Nuevo Mundo de los Especímenes Transparentes” de Iori Tomita.
Con una complicada técnica post-mortem, el artista sólo utiliza animales que le llevan los pescadores y que han sido encontrados muertos por causas naturales, los peces, crustáceos y anfibios se convierten en extrañas figuras transparentes y etéreas, una clase de anatomía dotada de una delicadeza sin precedentes, donde los huesos y el interior de los animales queda al descubierto y coloreado.
El propio Tomita fue durante muchos años pescador, antes de comenzar su carrera artística, e incluso estudió ictiología, la rama de la zoología dedicada al estudio de los peces.
Para producir uno de sus especímenes transparentes Tomita trabaja entre 5 y 12 meses, utiliza una técnica de preservación que consiste en quitar la piel y las escamas de los peces que conserva en formaldehído, después tiñe el cartílago de azul, y utiliza una encima digestiva llamada trypsin para convertir sus piezas en seres translúcidos, un paso especialmente delicado, ya que demasiada exposición a los químicos haría que los animales perdiesen su forma original; finalmente, tiñe los huesos con tinta roja, el resultado es algo así como el sueño psicodélico de un zoológico.