Humor impreso de la mano de Francisco Ibáñez
Antes de los memes e incluso de la existencia de internet, los cómics de humor estaban ahí para hacernos reír. Parodias y gags de la actualidad que pasaron de ser tiras o viñetas de prensa a abarcar todo un género de tebeos. Hoy vamos a hablar del artista más reconocido en España en este ámbito, Francisco Ibáñez Talavera, o simplemente Francisco Ibáñez.
Original de Barcelona siempre mostró interés y se declaró seguidor de autores como Escobar, Peñarroya o Franquin. Publicó sus primeras historietas profesionales en 1956 mientras seguía trabajando de oficinista en el Banco Español de Crédito. Trabajo que decidió abandonar para ejercer a tiempo completo como guionista y dibujante de cómics. Fue a su llegada a la editorial Bruguera cuando definiría su estilo y crearía a su dúo más conocido; Mortadelo y Filemón. Influenciados por el boom de los espías de la época igual que James Bond, Ibáñez se hizo un hueco rápidamente en la cultura española, que encontraba en sus páginas una caricatura de la sociedad, de algunas personas o eventos reales y chistes atemporales que siguen fascinando a los lectores a día de hoy.
Pero ¿tan grande ha sido su éxito? Y tanto que sí, creador prolífico con cientos de obras y personajes a sus espaldas, como Rompetechos, Pepe Gotera y Otilio, El Botones Sacarino, Chicha, Tato y Clodoveo, entre otros muchos. Destaca la calidad de su trabajo, unido a las ocurrencias que el autor tiene y su interés por dar lo mejor de sí mismo en cada entrega con un contacto permanente con los fans. Podemos comprobar como su humor no sólo gusta a los niños, sino también a sus padres y hasta a los abuelos. Una popularidad que ha traspasado y traspasa fronteras en todo el mundo y del que Ibáñez saca fuerzas para seguir generando aventuras ininterrumpidamente, con guiños a la actualidad sin renunciar por ello a mantener a salvo la esencia de los personajes.