David Lynch, el oscurantismo de culto
No seremos nosotros quienes, a estas alturas de la película, vayamos a descubrir la vida, obra y milagros de David Lynch (Estados Unidos, 1946). No obstante, este todoterreno de la creatividad no podía quedar sin mención en nuestra sección semanal sobre aquellos que son capaces de plasmar una visión que va más allá de la establecida.
Director, actor, guionista, pintor, escritor, cantante… Lynch es tan polifacético como docto en varias vertientes artísticas. Tiene una peculiar forma de entender el trabajo creativo, hasta tal punto de llevar al espectador al desasosiego. Todo gracias a haber conseguido introducir un particular oscurantismo en una filmografía que ya puede considerarse como de culto.
Desde The Elephant Man hasta Mulholland Drive, pasando por el fenómeno mundial de la serie Twin Peaks, el creador estadounidense penetra como ganzúa en las emociones humanas a través de escenarios que en ocasiones están a caballo entre lo surrealista y lo onírico. Unas propuestas abiertas a interpretaciones y dobles lecturas que hacen de Lynch una de las cabezas pensantes más privilegiadas.