Ni Lannister, ni Khaleesi, ni Stark…
Ni Lannister, ni Khaleesi, ni Stark… El Trono de Hierro del marketing de contenidos tiene un nuevo monarca, el vídeo. Si una imagen vale más que mil palabras, una en movimiento es una horda de ‘engagement’ para las empresas, construyendo con el producto audiovisual un maridaje perfecto entre la marca y el potencial consumidor.
Esto lo sabe bien Virgin America, la aerolínea del magnate y showman inglés Richard Branson, cuya estrategia de social media marketing -basada en la interacción con un ratio de publicación 24/7- se integra en el tejido de la compañía. Y para muestra, un botón. Su trabajo ‘Safety Dance’, en formato videoclip, reinventa el vídeo corporativo con un divertido tutorial que explica de manera amena y con un toque de humor las instrucciones de seguridad. Pop y algo de rap en lo que bien podría ser una muestra musical de las Pussycat Dolls o una de las escenas de las películas de Step Up. La genial coreografía explica cada paso del mensaje de seguridad que dan los sobrecargos de un vuelo a través del baile.
Conscientes de las bondades numéricas del vídeo, Virgin America echa toda la carne en el asador con una acción creativa con la que al espectador se le hace imposible dejar de mirar. Viral y con más de doce millones de reproducciones, genera de manera automática una relación con el potencial cliente.
El formato audiovisual es la joya de la corona del marketing de contenidos. Fácil de consumir y de difundir, es capaz de construir relaciones duraderas entre marca y consumidores.