Sobre temores y progreso
Es curioso cómo en muchas facetas de la vida existe cierto recelo con asuntos relacionados con el progreso que rompen el statu quo que domina nuestra zona de confort. Y esto vale para un simple cambio de look personal o para una obra cercana a nuestra vivienda. Nos cuesta asimilar los cambios y en muchas ocasiones los temores, muchas veces infundados, ciegan los beneficios del avance.
No ha pasado lo mismo, sin embargo, con las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación. Su exponencial crecimiento en los últimos años y su gran penetración en el grueso de la población no solo ha cambiado, sino también revolucionado, la forma de comunicarse e incluso de hacer transacciones comerciales. Todo gracias a esos apéndices tecnológicos que ya forman parte intrínseca de cada cual, incluso de aquellos que en sus inicios presumían de ser más críticos, más independientes.
El hilo de esta entrada viene motivada por los últimos datos dados a conocer al respecto del uso de la publicidad en teléfonos móviles. Y es que, según varios estudios, la temática que tiene la supremacía en los terminales inteligentes es la de, precisamente, las nuevas tecnologías. Otro dato de interés es el del porcentaje de internautas que ya se ha decidido a hacer algún tipo de compra a través de la red. En este sentido, la cifra se sitúa en el 40 por ciento, con gran predominio de la mujer y con la moda como adalid de las operaciones digitalizadas.
Seguiremos criticando las obras de nuestras calles, pero esta vez desde un terminal móvil…